Reflexiones: Obsequio sí, “coima” no

Obsequio sí, “coima” no

“La dádiva del hombre le ensancha el camino y le lleva delante de los grandes”.
Proverbios 18.16

No dejes de considerar este recurso que tanto beneficio traerá a tu vida.
Hablamos de obsequio voluntario, legítimo, amable, y no de un soborno que corrompe y no es aprobado por Dios.
Esta dádiva ensanchará tu camino, te facilitará las cosas y te simplificará la vida.
Para con la secretaria del médico que te da el turno. Para con el encargado de contaduría que te hace los pagos. Para con el cajero del banco que te da cambio. Para con el cartero que te trae la correspondencia. Si bien estas personas tienen la obligación de atenderte, lo harán de forma más esmerada si tenés una atención para con ellos.
No siempre la dádiva es material, también puede ser una palabra de reconocimiento, de aliento, interés por una necesidad, etcétera.
Este principio también se aplica a la secretaria de alguien importante que tenga que recibirte, ya que con el favor de esta te será más fácil concretar tu entrevista.
No te olvides que en un mundo de tanta hostilidad, la amabilidad siempre es de buen testimonio y bien recibida por los demás.
Hacelo no por un interés particular, sino de forma genuina para con los demás, y esto también se volverá en beneficio para tu vida.
Yo bendigo tu vida para que puedas desarrollar gentileza a la hora de actuar y se te puedan abrir todas las puertas sin estorbo y con facilidad.
Principios para el éxito Pastor Daniel González